La joven planilla de Carmelita está que no cree en nadie y aunque su técnico Mario Víquez también está muy contento, saben que lo que han alcanzado hasta el momento no se les puede subir a la cabeza.
Los de la barriada son una camada llena de juventud en todas sus líneas. Ganaron el domingo en San Carlos 2-1 y por ende son sublíderes del Apertura. Sin embargo, el objetivo de este equipo no termina ahí. Ellos, al igual que todos los equipos que disputan la primera división, quieren alzar el trofeo.
“Lo primero que hemos buscado desde que llegamos fue cambiar la mentalidad de equipo pequeño y que siempre debemos confiar en nuestro trabajo para no sentirnos menos que nadie y por eso seguimos trabajando con nuestros muchachos en que podemos ser ganadores, sobre todo en el campo de cualquier rival, independientemente de quien sea y en eso los jugadores poco a poco han ido mostrando el hambre de triunfo y crecimiento para dar buenos pasos, como lo marca el actual torneo”, comentó Mario Víquez, técnico carmelo.
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-¿Qué es lo primero que han marcado para cambiar la mentalidad?
A nosotros en cada partido nos debe quedar la satisfacción de que en nuestra casa o fuera de ella llegamos a proponer para ganar, a jugar mejor cada partido y la realidad del partido marcará un resultado, el cual para nosotros siempre tiene que estar del lado de la victoria, para mostrar que nuestro trabajo diario siempre va en ese sentido.
-¿Es cierto que los jóvenes solo ganan partidos y no campeonatos?
Nosotros como institución decidimos apuntar a los jóvenes y como todos los equipos que están en primera soñamos con ser campeones, porque sino no tiene sentido trabajar fuerte toda una semana para conformarse con un simple resultado. Entiendo por supuesto que algunos clubes tienen más posibilidades que otros de lograrlo, pero tenemos una serie de pasos a seguir para conseguirlo.
-¿Ustedes luchan por alejarse de los puestos de descenso o por ser campeones?
Los objetivos nuestros están diseñados de la siguiente forma: primero fue romper la mala racha que teníamos de no ganar en nuestro estadio y lo hicimos contra Limón. Luego era triunfar como visitantes frente a la Liga y lo hicimos. El otro objetivo después de ganar en el Morera, era clave demostrar que podíamos seguir ganando si el rival no era un grande y derrotamos a la UCR. También entendimos que sí ganamos tres juegos al hilo, porque no hacerlo con cuatro consecutivos y así lo sacamos en un terreno como el de San Carlos, que también pelea igual que nosotros. Y como vamos paso a paso, nuestro siguiente objetivo es sumar otros tres puntos y lo buscaremos contra Grecia el sábado que viene.
-¿Qué es lo primero que no debe pasar para lograr todos esos aspectos?
Sin duda que no debemos relajarnos y aunque estamos trabajando de lleno, no podemos pensar más allá del partido que viene, porque uno de los puntos principales para que un equipo sea campeón, está en tener los pies sobre la tierra y saber que solo llevamos seis partidos y que resta mucho, pero mientras estemos concentrados en este tema de no agrandarnos, sé que cada meta que nos pongamos, la vamos a conseguir.
-El joven mientras va creciendo en su vida deportiva a veces se despista con cualquier comentario positivo y otros temas, ¿cómo ataca eso?
Ahora que el equipo está ganando, de lógica aparecen buenos comentarios en los periódicos, la televisión, la radio, redes sociales y por eso les hemos dicho que todo eso es bonito, pero que no se suba a la cabeza, porque si se dan los señalamientos es gracias a lo positivo que hacemos, y entonces ellos entienden que el trabajo por hacer es más fuerte y no pensar que por esos comentarios ya está todo hecho.
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