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Parte de los restos quemados de Ally Lee Steinfeld fueron hallados en una bolsa dentro de un gallinero en el sur de Missouri. Le habían arrancado los ojos y apuñalado los genitales al joven trans.
Las autoridades no han revelado los sucesos que llevaron a la horrenda muerte de la adolescente, de 17 años. Pero descartan la posibilidad de que se tratara de un crimen motivado por el odio.
Oficialmente se han identificado los restos como los de Joseph Matthew Steinfeld Jr., el nombre de nacimiento de Ally Lee Steinfeld. El cadáver fue hallado la semana pasada en la población de Cabool, cerca de la casa rodante de uno de los presuntos asesinos, Briana Calderas, de 24 años, con quien vivía Steinfeld.
Calderas, Andrew Vrba e Isis Schauer, los dos últimos de 18 años, están acusados de homicidio agravado y otros crímenes. Un cuarto sospechoso está acusado de abandonar un cadáver y alterar pruebas.
Tanto el comisario James Sigman como el fiscal Parke Stevens Jr. insisten que el motivo del crimen no fue la identidad de género de Steinfeld.
“Yo diría que lo único que importa es lo de homicidio agravado. Eso en sí es un crimen motivado por el odio”, dijo Stevens.
El asesinato ha llamado la atención de los defensores de los derechos de los transgénero y otros en Estados Unidos, quienes creen que el motivo fue la identidad género de la víctima.
“Esta violencia motivada por el odio debe terminar” , dijo Chris Sgro, vocero de la Campaña por los Derechos Humanos.
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Añadió que Steinfeld fue la persona transgénero número 21, asesinada en el país este año.
"Lloraremos a Ally y combatiremos la transfobia y la violencia contra los trans”, señaló.
El abogado de los tres sospechosos, Michael Jacobs, dijo el martes que todavía no era el momento de hacer declaraciones.
