EscucharLa comunidad de Independence, en Missouri, Estados Unidos, está conmocionada con la muerte de Jerilynn Brown, una adolescente de 13 años, quien perdió la vida en un incendio el pasado 4 de julio, tan solo dos semanas después de haber superado un agresivo cáncer de huesos.
La vida de Brown cambió hace dos años cuando le detectaron osteosarcoma, uno de los cánceres óseos más difíciles de tratar en menores. A pesar de la devastadora noticia, ella comenzó desde el primer día a luchar por salvar su vida y a no dejarse vencer por la enfermedad.
La gran noticia llegó a finales de junio, cuando fue dada de alta en el Children’s Mercy Hospital, en Kansas City, tras completar exitosamente el tratamiento. Su familia lo celebró con una emotiva ceremonia, luego de haberla visto tocar la campana como símbolo de haber vencido la enfermedad.
Sin embargo, la felicidad se vio opacada por la tragedia, ya que la madrugada del 4 de julio, un incendio inesperado, provocado por los restos de fuegos artificiales utilizados durante la celebración del Día de la Independencia, acabó con la vida de Jerilynn Brown.
Jimmy Walker, jefe de bomberos de Independence, explicó que el viento que hubo durante la noche avivó las llamas, y lamentó que la vivienda no tuviera detectores de humo.
“No puedo asegurar que un detector de humo hubiera salvado vidas en este caso. Pero lo que sí puedo decir es que no habría hecho daño”, comentó Walker a los medios locales.
Estas son las víctimas de la tragedia
Pero la tragedia no terminó ahí, el fuego también cobró la vida de Marc Anthony Young, de 52 años, quien, tras luchar durante tres días, falleció a causa de las heridas. Además, la madre de Jerilynn Brown, Liz Stephens, permanece hospitalizada en estado crítico con graves quemaduras.
El padre de la joven, Jerry Brown, en una entrevista con uno de los medios locales, comentó que estaba devastado con la partida de su pequeña, pero que siempre la iba a recordar por el gran corazón que tenía.
“Quiero que la recuerden por lo que era: un alma brillante. Cuando venció la enfermedad, le dio regalos a todo el personal médico. Además, le firmaron un corazón que ella misma hizo mientras luchaba contra el cáncer. Jerilynn era una gran persona”, añadió Jerry.
Por otro lado, su padrastro, Stephen Miller, expresó su dolor ante la pérdida de la menor y recordó cómo ella le cambió su vida, ya que comenzó a asistir a la iglesia y logró dejar el alcohol.
“Ella tocó la campana en el hospital hace dos semanas y estaba libre de cáncer. Lamentablemente, hoy ya no está con nosotros”, comentó Miller al medio de comunicación CNN.
Como son varios incendios los que se están presentando en los Estados Unidos debido a las altas temperaturas, el jefe de bomberos Jimmy Walker destacó la importancia de contar con detectores de humo para evitar este tipo de tragedias.
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“Las horas pueden pasar mientras un fuego se mantiene latente, siempre debemos preocuparnos por los incendios que pueden pasar desapercibidos y volverse incontrolables rápidamente”, advirtió.
