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El oficial de la Fuerza Pública que falleció la noche de este miércoles 24 de enero, tras recibir un disparo en su cabeza en Jacó, era padre de tres niños.
La víctima fue identificada como Bryan Rivera Oviedo, de 28 años, y según el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) deja tres hijos pequeños, un varón de diez diez años, así como dos chiquitas, una de seis años y otra de un mes de nacida.
Rivera, quien era vecino de Puntarenas, era policía de apoyo operacional, de la zona de Jacó.
Según información de las autoridades, este policía se enfrentó a unos sujetos, quienes estaban atrincherados disparando en el sector de Las Parcelas, en Jacó, y producto del intercambio de disparos, Rivera recibió un balazo en la cabeza.
Cuando las unidades de la Cruz Roja llegaron, trasladaron a Rivera de inmediato a un centro médico, sin embargo; minutos después fue declarado fallecido.
Ante este lamentable hecho, las autoridades han detenido a tres sospechosos de protagonizar esta violenta balacera.
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Este es el segundo oficial asesinado en el cumplimiento de su deber, en lo que va del año, pues el pasado 18 de enero falleció otro oficial de la Fuerza Pública en el sector de Limón, quien fue identificado como Jordy Rojas y quien trabajaba en la delegación de Siquirres.
